martes, 31 de enero de 2012

Nada


Primero, no había nada.
Después, llegó alguien, que se vio rodeado de nada. Pero ese alguien se aburría. 
Se acercó alguien más, y ambos empezaron a sentir cómo nada los unía, para nada y contra nada, aunque tampoco nada los separaba. Nada. 
Mientras se hacían a la idea, nada impedía jugar o hablar a ambos; y no pudieron ni divertirse ni dialogar, porque nada dictaba reglas muy estrictas para ambos.
Ante la abundancia de normas, pensaron que nada podría detenerlos por no hacer nada malo. 
La idea era buena, no hagas nada y nada pasará ... de largo. Y pasó.

8 comentarios:

  1. Total que al final, nada de nada. Me ha encantado, Antonio. Gracias. (No vale decir..."De nada" ;-)

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  2. Como quizás hayas comprobado, ¡en este blog, un comentario lo es TODO!!
    Gracias a ti

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  3. Iba a dejar un comentario elegantemente en blanco, pero blogspot entendió que mi idea de la elegancia no era apta para estos cauces de expresión, información y comunicación.

    Luego pensé en hace un comentario lleno de palabras, pero ya me pareció forzado.

    Así que, finalmente desistí (hoy no estoy muy perseverante para mi escasa creatividad) y decidí simplemente comentar lo que se me ocurra hasta que me canse de escrib

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  4. Él le preguntó: -Qué te pasa. Y ella respondió. - Nada.

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  5. Intriguing and inventive write. Quite thought-provoking.

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  6. Thank you for your comment, Robert, this is exactly the aim of my 100 words

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